(Codeson) Hermosillo, Sonora.- El corredor sonorense Tonatiú López sumó otra competencia exitosa en su regreso a las pistas al llevarse el primer lugar en los 800 metros planos el pasado fin de semana en la Copa Nuevo León de Atletismo, efectuada en la capital regiomontana.
En el evento, celebrado del viernes al domingo en las instalaciones del CARE ubicadas en el Parque “Niños Héroes” de Monterrey, el mediofondista, que ya tiene la marca para los Juegos Olímpicos de Tokio, resultó el mejor en su prueba tras detener el reloj en 1:46’84.
El “Tona” superó en la prueba de 800 metros al chihuahuense Jorge Arturo Montes Barraza quien terminó con tiempo de 1:49’71, mientras que el tercer puesto le correspondió a José Eduardo Rodríguez Garibaldi, de Guanajuato, luego de culminar la distancia en 1:50’89.
Con ese registro López Álvarez logró imponer un nuevo récord para el certamen nacional neolonés y curiosamente dejó atrás una marca que él mismo había establecido dos años antes en el 2019, la cual era de 1:47’03.
De esta manera el hermosillense mantiene una buena forma después de su retorno a las competencias oficiales tras más de un año y medio de inactividad debido al parón de eventos atléticos alrededor del mundo a causa de la pandemia de coronavirus.
Fue apenas la segunda competencia para Jesús Tonatiú en un lapso de casi 20 meses ya que a finales de febrero vio acción en Estados Unidos en un clasificatorio de atletismo el cual albergó Austin, Texas, y en donde consiguió el segundo sitio en los 800 metros.
La quincuagésima tercera edición de la Copa Nuevo León, fue el primer torneo presencial del año programado por la Federación Mexicana de Atletismo, y se llevó a cabo bajo estrictos protocolos sanitarios dictados por las autoridades federales y estatales para prevenir posibles contagios entre los atletas, cuerpo técnico y organizadores.
De hecho, para participar, los casi 600 atletas de todo el país reunidos en el evento, tuvieron que presentar resultados de la prueba PCR; ya dentro de las acciones los deportistas portaron obligatoriamente tapabocas –sólo no lo usaron al competir- además se les tomó la temperatura, hubo aplicación de gel desinfectante a cada momento y respetaron la sana distancia. En el caso de las pruebas de campo, los implementos fueron higienizados antes y después de utilizarse.