Houston, Texas.- Blake Corum corrió para 134 yardas y dos touchdowns en el último cuarto, mientras Jim Harbaugh y el #1 Michigan, sin inmutarse por las suspensiones y un caso de robo de señales que ensombreció el programa, completaron un ascenso de tres años hacia un campeonato nacional al vencer al #2 Washington por 34-13 el lunes por la noche en el juego por el título del College Football.
Los Wolverines (15-0) sellaron su primer título nacional desde 1997 cuando Corum, quien anotó el touchdown ganador en tiempo extra para vencer a Alabama en la semifinal del Rose Bowl, crorrió desde la yarda 1 con 3:37 por jugarse para poner arriba a Michigan por 21 puntos y desencadenó otra interpretación conmovedora de “The Victors”.
Después de nueve temporadas entrenando a su alma mater y en su tercera aparición consecutiva en los playoffs, Harbaugh entregó el título que muchos esperaban cuando se hizo cargo de una potencia en dificultades en 2015, a pesar de perderse seis juegos de la temporada regular esta temporada mientras cumplía suspensiones separadas.
Y lo hizo con un equipo que su antiguo entrenador, Bo Schembechler, habría adorado. Los Wolverines corrieron 303 yardas contra Washington (14-1), y su defensa limitó el prolífico juego aéreo de Michael Penix Jr. y los Huskies a solo un touchdown mientras interceptaron dos veces al subcampeón del Trofeo Heisman.
La notable carrera universitaria de seis años de Penix terminó con quizás su peor desempeño de la temporada. Por lo general, imperturbables por la presión, los pases de Penix no fueron tan precisos contra una defensa de Michigan que le quitó sus característicos lanzamientos profundos.
Penix terminó 27 de 51 para 255 yardas y un touchdown.
J.J. McCarthy, de Michigan, tuvo un juego modesto, lanzó para 140 yardas y corrió para 31. Pero fue suficiente para mejorar a 27-1 como titular de los Wolverines.
