GANAN CON PENAL DE ÚLTIMO MINUTO

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(rugbyworldcup.com) Whangārei, Nueva Zelanda.- Dos tries de Megan Gaffney en el segundo tiempo fueron en vano, ya que el primer partido de Escocia en una Rugby World Cup en 12 años terminó con una desgarradora derrota por 18-15 ante Gales.

Gales había dominado el marcador en todo momento, liderando desde el minuto 6 hasta dos minutos para el final, cuando Gaffney anotó su segundo try del juego para empatar el partido.

Mientras todo el mundo esperaba que el partido terminara siendo tan solo el tercer empate en la historia del torneo, después de 25 fases de juego y con el reloj en rojo, Gales recibió un penal que la ingresada medio scrum, Keira Bevan, manteniendo la calma, convirtió desde 30 metros para darle la victoria a su país.

Con muy poco para elegir entre los equipos del ranking femenil de World Rugby impulsado por Capgemini y un historial de partidos cerrados entre estos equipos, este enfrentamiento, habitual en las Seis Naciones, comenzaba sin un claro candidato.

Sin embargo, Gales comenzó con mucha más confianza, ya que su mayor experiencia en Rugby World Cup les permitió adaptarse a su ritmo.

Fue todo de Gales durante la mayor parte de la primera mitad y merecieron abrir el marcador en el minuto seis cuando Alisha Butchers remató desde corta distancia; Eleanor Snowsill convirtió.

Con Megan Webb haciendo un par de quiebres en el centro del campo, Gales continuó con el pie delantero y otro penal de Escocia fue castigado por Snowsill, llevando la ventaja de Gales a cifras dobles con 13 minutos para el final.

Gales parecía realmente fluido en ataque y solo el impresionante trabajo de Escocia en el breakdown, liderado por Sarah Bonar, evitó más puntos en contra.

Gradualmente, Escocia, encontró su compostura y logró obtener algo de territorio y posesión.

Después de que Helen Nelson fallara un penal, la presión sostenida dentro de los 22 metros de Gales finalmente se notó cuando Lana Skeldon apoyó gracias a un maul justo antes de la media hora.

Aún así, Gales terminó el primer tiempo más sólido y anotaron su segundo try con un hábil movimiento de contraataque de primera fase, con la hábil descarga de Hannah Jones creando espacio a la derecha para que Kayleigh Powell rematara.

La apertura de Escocia, Nelson, tuvo la oportunidad de reducir el déficit cuando Escocia recibió otro penal justo antes del descanso, pero falló por tercera vez desde el tee, arruinando gravemente su kick desde prácticamente frente a los postes.

El comienzo de la segunda mitad reflejó el primero y se necesitó un tackle salvador de la medio scrum escocesa Caity Mattinson sobre Jasmine Joyce para evitar que Gales ampliara su ventaja.

Escocia recurrió a sus delanteras para volver al partido y después de un período de 12 minutos dentro de los 22 metros de Gales y una larga detención por una lesión de Eilidh Sinclair, la marea finalmente comenzó a cambiar.

Gales quedó con 14 jugadores cuando la referí Clara Munarini envió a Cara Hope al sin-bin luego de una sucesión de penales en el scrum y Escocia aprovechó cuando extendieron el balón para que Megan Gaffney anotara con mucho espacio disponible.

Una galopante corrida de Butchers casi cierra el partido para Gales, pero fue frenada por un tackle a centímetros, resultando lesionada.

La actitud defensiva de Escocia de nunca rendirse hizo que se mantuvieran cerca de Gales y una segunda tarjeta amarilla para Gales, a Joyce por un knock-on intencional, ayudó aún más a su causa.

Con todo el impulso ahora del lado de Escocia, Gaffney mostró una fuerza suprema en el contacto para apoyar en la misma esquina que su primer try, pero Nelson no pudo convertir desde lejos.

Fue su quinto fallo de cinco y, en definitiva, esos tiros fallados le costaron a Escocia el partido, cuando Bevan les hizo pagar su última infracción.

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