(Redacción Cimarrones) Culiacán, Sinaloa.- Los Cimarrones de Sonora tuvieron una prueba más dentro de su programa de pretemporada, al visitar a los Dorados de Sinaloa, en un formato de 4 tiempos de 40 minutos, donde se pudieron ver dos cuadros totalmente diferentes de cada lado, incluyendo a algunos juveniles de las fuerzas básicas del Club.
Con lo que se pudiera considerar el cuadro base, que ha venido plantando el profesor Gabriel Pereyra, Cimarrones fue ampliamente superior a los locales, quienes solo tuvieron una aproximación de larga distancia que rozó la horquilla del arco defendido por Gabino Espinoza, mientras que el control el juego corría a cargo de los sonorenses.
Fue hasta el segundo periodo cuando se abrió el marcador por conducto del hermosillense Francisco Javier Acuña, quien tomó un balón en ¾ de cancha, luego de una mala salida del arquero local, y desde ese punto lo clareó, en una fiel copia del que el propio “Jicamita” le había convertido la semana pasada a Mazatlán.
Luego vino una jugada de conjunto entre Daniel Cisneros, el propio Acuña, quien mandó un centro pasado y cuando todo mundo esperaba la volea de Alfredo Peralta, el “Mochis” tocó inteligentemente hacia atrás a la llegada de Edson Torres, quien de pierna izquierda colocó suavemente el esférico a segundo poste para firmar un verdadero gol de “billarista”.
Para el tercer periodo las cosas pintaban de la misma forma, ya con el segundo cuadro en la cancha, y en una falta cerca del tiro de esquina, fue Antonio Cortés quien mandó un centro tendido y preciso a la cabeza de Raí Villa, quien se adelantó a toda la defensa para prolongar el balón con la cabeza a segundo poste para incrementar la ventaja.
Para el último cuarto los locales se fueron con todo y ante un terreno flojo por la lluvia que se presentó en el juego, las acciones se fueron tornando más ríspidas y al filo de la navaja, lo que provocó que los ánimos se subieran de tono y ante el desconcierto, los sinaloenses consiguieron darle la vuelta al marcador en los últimos minutos.
El sabor del resultado no dejó contento a nadie del cuerpo técnico de Cimarrones ni a nadie de la plantilla, sobre todo por el dominio que habían demostrado en gran parte del compromiso sobre el rival, sin embargo, es ese punto precisamente el que los deja tranquilos, pues desplegaron un futbol con mucha asociación entre las líneas y sobre todo mantienen la inercia goleadora que han tenido en toda la pretemporada.
El siguiente y último partido amistoso para los Cimarrones será el próximo martes 20 de julio antes los mismos Dorados de Sinaloa, pero esta vez en Hermosillo, en la cancha del Héroe de Nacozari, en donde buscarán cerrar de la mejor forma su pretemporada de cara al inminente inicio de la Liga BBVA Expansión MX una semana más adelante.