Busca la gloria en el boxeo

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Hijo de inmigrantes mexicanos, nativo y residente de una pequeña población agrícola en California (Avenal), donde él es el estandarte y la voz de esta comunidad que busca, desde hace años, solucionar su problema de desabasto de agua para sus cultivos, José Carlos Ramírez ya llegó a la cúspide en el boxeo profesional, ahora busca la gloria.

Ramírez (24-0-0, 16 ko’s), campeón Superligero CMB, se enfrentará al campeón de la OMB, Maurice Hooker (26-0-3, 17 ko’s), en pelea unificatoria a realizarse en Arlington, Texas, y cuyas acciones llegarán a México por la señal de Azteca 7, la Casa del Boxeo.

Para José Carlos Ramírez, la responsabilidad es al doble, aunque eso no lo traduce en presión, sino en motivación.

“Se siente bonito tener este apoyo, estoy en una posición que muchos quisieran, tengo la motivación de salir adelante y darle alegrías y confianza a la gente que así como yo, tiene padres inmigrantes y que quiere hacer algo positivo, espero ser un buen ejemplo para todos…voy a continuar con esa batalla hasta que la gente pueda trabajar bien, queremos asegurar agua para que la gente pueda trabajar los próximos diez años, cada vez dura menos la temporada de trabajo, cada temporada es más corta y sé que ganando podré hacer una diferencia”, refirió Ramírez en entrevista.

José Carlos Ramírez representó a Estados Unidos en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, y fue dos veces campeón nacional amateur. De niño, vio cómo su papá luchó por el derecho al agua en su comunidad, mientras él trabajaba jornada de 10 horas en el campo, en la pizca de chile.

Dejó los estudios para dedicarse de lleno al boxeo, y creó una fundación para otorgar becas escolares a hijos de inmigrantes. Hasta ahora, su fundación ha otorgado apoyos por más de 50 mil dólares.

Su manejador, Rick Mirigian, tiene un concepto muy claro de José Carlos Ramírez.

“Desde Muhammad Alí, Ramírez es el boxeador que ha estado más involucrado en el activismo social, ya sea en defensa de los derechos de inmigrantes, o en luchar por el agua para su comunidad. Él pone su dinero, y sus puños, en acción, no sólo su boca”.

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