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No hubo hazaña para los Celtics de Boston y finalmente primó la lógica de la temporada regular,
Los Bucks de Milwaukee, con Giannis Antetokounmpo como líder, se impusieron por 116-91 en el quinto partido de las semifinales del Este y rubricó su clasificación a las finales de conferencia, donde espera por el vencedor de Toronto Raptors-Philadelphia 76ers.
Boston, otra vez víctima de una evidente anemia ofensiva, tuvo en Kyrie Irving a su máximo argumento ofensivo con 15 puntos.
Deslucido en ataque y en defensa, cuestionado por propios y ajenos, pudo haber sido el último encuentro de Irving en los Celtics.
Fue el final para unos Celtics irregulares durante toda la temporada, un equipo que jamás alcanzó el potencial que el imaginario colectivo había construido.
De decepcionante actuación, la gerencia y Brad Stevens tendrán que tomar algunas decisiones drásticas de cara al año próximo.